El cariño que tengo hacia estos perros por su nobleza, su equilibrio emocional, belleza, su fidelidad, su buen hacer en el agarre, su valentía, su seguridad en aquello que hacen, el no ser muy ladrador y fundamentalmente que es una raza española; hicieron plantearme el tratar de conseguir una línea que cumpla con los cánones mas exigentes respecto a la raza, como en su día hice con los podencos de talla chica.